La alerta fue dada ayer, la ex alcaldesa provincial Rufina Lévano Quispe era emplazada mediante Edicto Judicial, aparecido en el mismísimo diario El Peruano, para rendir instructiva el próximo 9 de octubre ante la Sala Penal de Cañete acusada del delito de Violación Sexual.
Tirios y troyanos se movieron entonces, alarmados los adeptos a la ex autoridad y satisfechos los contrarios. Hoy, Rufina Lévano acudió hasta las oficinas de la propia Corte para esclarecer el caso que finalmente se trató del craso error de un despistado secretario judicial. Debiendo la propia Sala emitir una rectificación.
Pero como no hay mal que por bien no venga, los cuestionadores de Rufina Lévano se quedaron pensando de qué se trataba esa acusación de Peculado.
La versión de la acusada señala que se trata del manejo en el 2003 de los fondos destinados al Concurso del Pisco en Cañete (unos 6 mil soles que fueron entregados para su administración al ex regidor Alberto Rivadeneyra). Dice Lévano que al momento de rendir cuentas el asistente de Rivadeneyra, Guillermo Zapata, le empezó a solicitar se le reembolse gastos por llamadas telefónicas, hospedajes, restaurantes, etc. La entonces burgomaestre no accedió y le reconocío sólo el 50%.
De ello se valieron sus enemigos - continua - y presentaron denuncia por Peculado a pesar que se les demostró a los jueces en primera instancia que los aportes utilizados para el evento no provenían de las arcas ediles sino del capital privado (aportes de Western Cotton y otros). Al final por un supuesto faltante de S/. 300 se procedió a denunciarla.
Imágenes de Buenos Días Cañete
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