8/31/2009

TARDE COMO SIEMPRE CONGRESISTAS SE DAN CUENTA QUE NO HAY RECONSTRUCCION DESPUES DEL TERREMOTO 2007

El presidente de la Comisión de Fiscalización del Congreso, José Vega Antonio, dijo ayer que el miércoles su grupo de trabajo llamará a los involucrados en la demora de la reconstrucción de la zona afectada por el terremoto del 2007, incluyendo al presidente regional de Ica, Rómulo Triveño.

A su vez, el congresista de Alianza Parlamentaria y ex ministro de Vivienda, Carlos Bruce, sostuvo que no se ha construido ni una casa con los bonos de reconstrucción de 6 mil soles que el Estado otorgó a los damnificados del terremoto del 2007.

Pronosticó que habrá gente del Banco de Materiales “que va a terminar presa” por lo que hicieron en el tema de la rehabilitación de zonas devastadas. Sostuvo que sería “lamentable” y no debería sorprender, la denuncia de que las viviendas de “Techo propio” no estarían siendo entregadas a los verdaderos afectados por el sismo.

También recordó que “Techo propio” está paralizado y sin fondos. Calificó como una “tontería suprema” que no se entregue los recursos necesarios a ese programa.

A más de dos años del terremoto de sur, las viviendas de los ciudadanos aún están en ruinas, lo cual es una demostración palpable de que el anuncio del presidente Alan García, al día siguiente del terremoto, de que la reconstrucción iba a ser efectiva y rápida quedó en el tintero de las promesas.

Los presidentes de los gobiernos regionales de Ica, Rómulo Triveño, y de Lima, Nelson Chui, acusados por el presidente Alan García de retrasar la reconstrucción del sur por un deficiente uso de los recursos que supuestamente tienen para ese fin, insistieron en sostener que es el gobierno central que demora las obras de reconstrucción del sur.

Coincidieron en señalar que el Fondo de Reconstrucción del Sur (Forsur) es una institución ineficiente.

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1 comentario:

Jorge Esquerre G dijo...

El Estado difundió la entrega de más de 50,000 Bonos Familiares Habitacionales para el presente año en la Modalidad de Construcción en Sitio Propio, de los cuales sólo 15, 371 se han hecho efectivos a través del Fondo Mi Vivienda, que desde el 11 de junio, fecha que se publicó una norma en el Diario Peruano suspendiendo el programa, han empezado a solicitar fondos para cumplir con su meta difundida.
Más de medio millar de pequeñas y microempresas que hemos apostado por este importante Programa Social estamos paralizadas en diversas etapas del proceso: elegibilidad, asignación de bono y desembolsos; lo que nos acarrea conflictos financieros.
El Ministerio debe pronunciarse con respecto a los subsidios que se han quedado en el aire, puesto no sólo perjudica directamente a las empresas, sino también al circuito productivo y al consumidor final que son las familias de escasos recursos que esperan ilusionadas el lugar que los acobijará.
Es urgente que se extienda un presupuesto adicional para cubrir la demanda existente de los expedientes ingresados y con registro de proyecto que han sido excluidos, los cuales entre solo las regiones de la Libertad y Lambayeque bordean los 2000 para asignación del Bono; como también el reinicio de las actividades de Registro de Proyectos.
El estado debe asegurar los desembolsos de todos los Bonos tramitados a través de un transparente cronograma de pago para evitar los favoritismos entre aquellos conocidos empresarios que tienen afinidad política con el régimen.
También cabe resaltar que existen nuevas Entidades Técnicas, que estuvieron promocionando las bondades del Programa Sitio Propio con sus recursos económicos para ser parte de esta cadena socio-productiva y se han quedado en el partidor, sin lograr inscribir a muchas familias; por lo que es necesario hacer un inventario o censo social de aquellos que ya estuvieron encaminados en el programa.
Se hace un gran llamado a los representantes del Ministerio y del Fondo Mi Vivienda para cumplir le meta esperada y no jugar con las expectativas de las familias que esperan una vivienda digna y segura; puesto que el país ya no necesita más conflictos sociales sino esperanza para su desarrollo.