Quien salió ganando del bolondrón que se formó ayer fue sin lugar a dudas Chilca a quien se le entregó la administración de los pozos de agua que venían siendo gerenciados por Emapa mediante contrato. El burgomaestre de dicho distrito graficó ante el pleno de los accionistas la exasperante situación: apenas 30 minutos diarios de agua; distribución insuficiente del líquido por parte de camiones cisternas de Emapa que dicho sea de paso se surten de pozos que tienen contenidos fecales; la salinización de los pozos por la sobrexplotación de la napa freatica en el distrito (existen más de 400 pozos la mayoría de los cuales está en manos privadas). A ello se suma que Nalda ha invertido de las cuentas ediles un millón ochocientos mil para perforar pozos y Emapa se hacía el loco para su devolución.
Finalmente, la Junta Universal, práctimente sitiada por los pobladores que hacían escuchar sus gritos desde la Plaza de Armas, aprobarón celebrar contratos renovables por un año con el ente edil de Chilca hasta que éste recupere su inversión. Nalda señaló que invertiría un millón doscientos más y Javier Alvarado otro tanto.
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* LAS ULTIMITAS DEL 2008 .
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