Hoy, desde tempranas horas, cientos de obreros de construcción civil se reunieron en las principales vías de la ciudad concentrándose finalmente en la Plaza de Armas de Imperial. La razón: llamar la atención de las autoridades locales por la infiltración de delincuentes de la que estaría siendo objeto el gremio.
Mario Tapia, secretario general, señaló primero ante el alcalde de Imperial, Richard Yactayo y luego ante Javier Alvarado que en las últimas semanas se están creando "dirigencias" paralelas conformada sobretodo por bandas organizadas que no sólo cobran "derechos de afiliación" a quien quiera unírseles sino que se encargan de extorsionar de diversas maneras a las empresas privadas que realizan obras en la provincia. Tapia señaló que el objetivo principal es lograr tomar el control de su representada.
El dirigente y los burgomaestres acordaron estrechar relaciones a fin de evitar que en Cañete se instalen las mafias que han hecho de las obras públicas y privadas en Lima un verdadero infierno.
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