La ministra de Cultura, Susana Baca, lloró hoy al recordar la discriminación racial que sufrió a lo largo de su vida, durante una conferencia de prensa con medios extranjeros en Lima. “He sufrido en carne propia la discriminación desde niña. He visto lesionada mi integridad como ser humano por esta situación. Es algo muy doloroso y me da un malestar muy profundo. No quisiera que los niños vivan lo que yo viví”, afirmó Baca, quien quiere orientar su gestión hacia la inclusión social.
Susana Baca también evocó los ataques racistas en redes sociales durante la campaña electoral presidencial de este año, la cual ganó Ollanta Humala Tasso.
“Creímos que habíamos superado los problemas de racismo. Pero durante la campaña se vio a peruanos despreciando a peruanos por su color de piel, por su forma de hablar y de expresarse. Aún hay discriminación racial”, expresó.
Baca, de 67 años y ganadora del Grammy Latino, es la primera mujer negra que asume un ministerio en el Perú. Entre sus principales medidas para paliar el racismo está la creación de un observatorio para registrar cómo se va superando “la tara de la discriminación”.
En los casi tres meses de su gestión, la funcionaria no ha estado lejos de la polémica. Diversos sectores criticaron que continúe realizando giras musicales al exterior, con lo que supuestamente descuidaba su labor. Anunció la suspensión de sus conciertos de noviembre, pero dijo que no abandonará la música.
“La música no es posible dejarla. Antes, mi trabajo era ensayar cuatro veces por semana con mis músicos. Ahora pienso retomar aunque sea dos horas de ensayo una vez por semana. Buscaré un espacio dentro del ministerio para hacerlo”, dijo la artista.
El Ministerio de Cultura, con más de un año de creación, tiene muchas demandas por resolver, entre ellas la ampliación de su presupuesto: “Yo me encuentro en una situación de orfandad”, mencionó Baca.
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