Estar a punto de nacer y no tener otra opción que hacerlo en nuestro hospital Rezola de Cañete es sumamente peligroso. Ello se desprende del acta que fuera levantada el pasado 25 de agosto por la propia Dirección Regional de Salud de la Región Lima que arribó a Cañete para ver el tema de categorización del nosocomio y se topó con una espeluznante realidad.
Como deficiente es calificada la organización para la atención del parto y del Recien nacido evidenciandose en ese momento la ausencia de profesional médico que permita un adecuado y sobretodo seguro alumbramiento. Para colmo de males en el Centro Obstétrico se encontraron medicamentos e insumos vencidos.
Si usted cree que con ello acabó, agárrese, no se cuenta con ambientes de monitoreo fetal, ecógrafo y equipamiento mínimo para la atención de pacientes. En el ambiente destinado al seguimiento del post parto el techo se está cayendo y si uste cree que ya se terminó se equivoca, el acta señalan que los procesos de Limpieza, Desinfección y esterilización no se cumplen y en el mejor de los casos el equipo se encuentra inoperativo.
El documento de terror es firmado entre otros por Jimmy Pérez Larru, Director de Medicamentos, insumos y Drogras de la Diresa; Fausto Espinoza Ibáñez, del área de proyectos de infraestructura; Ofelia Aguirre Romero, médico auditor; Janeth Irene Ocon Roncal, enfermera, entre otros. En base a información del grupo De Primera.com
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