El espíritu separatistas en las poblaciones es insuflado principalmente por la postergación que las mismas reciben de una burocracia centralizada. A nivel de Cañete ese desarraigo es posible encontrarlo, por ejemplo, en distritos como Mala o Asia (que no hace mucho proclamo en voz alta su deseo de ser provincia). ¿Qué tan ligados se sienten los maleños, chilcanos o asianos con la problemática que se vive en Imperial y San Vicente?
A nivel nacional ese divorcio es posible distinguirlo en el surgimiento de un corriente reivindicatoria de la Nación Aymara, una etnia con más de 600 mil habitantes en el Perú, que en su mayoría son de Puno, Arequipa, Moquegua y Tacna pero que también es posible encontrarlos en distritos yauyinos como Tupe.
¿Acaso los propios cañetanos no sentimos que mejor estariamos conformando región con Lima Metropolitana o Ica que con los hermanos del norte? Dejamos estos planteamientos para discusión de nuestros lectores.
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