La importación de cerebros no termina de cuajar bien en la gestión de Alvarado, las múltiples decapitaciones que se ha visto obligado realizar en sus gerencias y los reiterados traspies de su personal de confianza han empezado a mellar su imagen.El último de sus tropiezos parece haber sido la designación como Ejecutor Coactivo de la Municipalidad del iqueño Gabriel Márquez Ludeña, otrora asesor protocolar de Alvarado y luego encargado de supervisar el reparto de donaciones para las víctimas del terremoto. La designación contravendría la norma que señala que dicho cargo sólo puede ser otorgado mediante concurso público y a un abogado. Lo que ha sido reconocido por él mismo.
Como tiro de gracia Máquez Ludeña a pesar que registra ante la Sunat estar dedicado a ACTIVIDADES JURIDICAS consultada la página del Colegio de Abogados de Lima no figura en actividad. ¿Será abogado habilitado? Esperaremos su respuesta.
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