Herencia para la nueva alcaldesa María Montoya. La Municipalidad de Cañete acaba de sufrir el embargo de cuatro millones de soles de sus cuentas por parte de la poderosa empresa TEC CORPORATION, quien hace más de 10 años ubicara semáforos en San Vicente de Cañete y cuyo leonino contrato firmado en la época de Jaime Wong fuera roto unilateralmente por el gobierno de Rufina Lévano.
Aún cuando oficialmente los canales de comunicación de la entidad pública se han cerrado para evitar el escape de información, se conoce que existe gran preocupación puesto que en pleno proceso de transferencia serían numerosos los proveedores que se quedarían con los crespos hechos al no recibir el pago por los servicios prestados debiendo esperar hasta que María Montoya asuma la posta y vea como sale de tremendo legado que le deja la gestión saliente.
El tema con la Traffic Engineering & Control es un pasivo que viene arrastrándose ya hace varios años. Recordemos que uno de los primeros informes que emitió el ex alcalde Javier Alvarado al asumir su gestión fue que la Municipalidad de Cañete tenía un laudo arbitral por cinco millones contra dicha empresa privada. ¿Qué se hizo desde entonces? Nada. Las ultimas noticias de esta empresa nos llegaron desde el norte en donde embargó las cuentas de la Municipalidad Provincial de Huaura debido a que pasó lo mismo que en nuestra provincia: un porcentaje de las papeletas impuestas por infracción a las señales de tránsito que debía ser destinado a la policía nunca llegó, la policía pitió, se incumplieron las inversiones al ya no imponerse papeletas y se rompió el trato.
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