Ayer 07 de enero se llevó a cabo la primera Sesión de Concejo Provincial. A la cita, puntualísimos, concurrieron los regidores y el Alcalde Provincial. Nada hacia presagiar que esta primera reunión se convertiría en el primer barómetro de fuerzas políticas que se van a dar al interior del ente edil.
De arranque, el regidor Percy Alcalá solicitó se respete las formalidades al llevar la Sesión de Concejo toda vez que Alvarado había solicitado se vaya directamente a tratar los dos puntos de agenda programados (comisiones de trabajo y autorización de firmas) saltándose las etapas de informes y pedidos. Sin perder la compostura, Alvarado tuvo que acceder al error.
Cuando ya se estaban relacionando las comisiones, envalentonado, Alcalá fustigó nuevamente señalando que en el cuadro de comisiones al teniente alcalde, José Espinoza, erroneamente se le había asignado la Comisión de Obras cuando el reglamento prohibe que el mismo asuma la presidencia de las comisiones ordinarias. A lo que el Concejo no tuvo otra salida que ceder la posta de tan importante Comisión al nuevecito Oscar Ramos Navarro. Duro golpe.
Si bien, fiel a su estilo concertador, Alvarado no perdió los papeles, es necesario se avispe en lo sucesivo puesto que trata ahora con gente ducha en materia edil. Y más aún si en la persona de Alcalá, tal como se vislumbra, se unificará la oposición.
1 comentario:
ESta bien que caiga esa responsabilidad en manos de gente q no se dejen manejar
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