Acorde con sus formación búfalo-partidaria, el viceministro de Justicia, Erasmo Reyna Alcántara, pretendió reprender a los cañetanos por levantarse a protestar contra la edificación de una nueva cárcel en Cañete.Lo peor es que sus bufadas fueron vertidas en los ambientes de la propia Municipalidad de Cañete y ante la impasible presencia de las autoridades locales. Reyna, quien arribó a la provincia en horas de la tarde, señaló que no debemos ser egoistas y que el Estado también piensa en quienes han sido privados de su libertad injustamente.
Tratando de dictar cátedra de civismo, el viceministro señaló que lejos de alentar a realizar protestas se debe trabajar con las autoridades para buscar soluciones. Al final el altanero compañero señaló que el Estado otorgará prioridad a la construcción del penal en Chincha pero no negó ni confirmó se haya dado marcha atrás con el de Cañete.
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