La corrupción que corroe al Apra llega a tal punto que la militancia del partido fundado por Haya de la Torre no sólo cuestiona el comportamiento de sus máximos dirigentes (Jorge del Castillo, secretario general político y ex premier, y Omar Quesada, secretario general institucional y ex presidente del Cofopri) sino que también espera un pronunciamiento institucional e incluso demandan que renuncien a sus cargos.
Los últimos escándalos por la irregular venta de extensos terrenos en el distrito sureño de Chilca, en el caso de Quesada, y la intermediación ilegal a favor de un empresario petrolero, en lo que respecta a Del Castillo, han ocasionado que apristas de reconocida militancia como Jesús Guzmán Gallardo no los reconozca más como sus máximos dirigentes y hasta exijan que sean alejados del partido.
“La dirigencia aprista no sólo ha desgastado al Apra sino que ha destruido su imagen. Pero esto es consecuencia del último congreso, que fue una farsa, por lo que nos reafirmamos en pedir un congreso extraordinario, pero bajo la batuta de Enrique Cox, Luis Negreiros, entre otros apristas respetables”, expresó Guzmán a LA PRIMERA.
Recordó que las denuncias de enriquecimiento ilícito de parte de las cabezas visibles del partido vienen desde el año 2003. Cuestionó, asimismo, que los dirigentes implicados hasta la fecha no explican de dónde tienen tanto dinero para adquirir inmuebles. Para Guzmán lo peor es que estas compras no las hayan consignado en sus declaraciones juradas como funcionarios públicos.
En tanto, el legislador oficialista Luis Negreiros señaló a LA PRIMERA que la militancia aprista espera una respuesta institucional sobre este caso, “que ya se está tardando”, como lo dictan los estatutos partidarios y la historia del partido en estos casos. “El Apra tiene importantes reservas morales en la historia y este caso puede ser asumido por el tribunal de ética que tiene mecanismos y procedimientos porque todos estamos bajo el escrutinio y veredicto del partido como decía Haya de la Torre”, indicó.
Por su parte, el subsecretario general del Apra, Wilbert Bendezú, valoró la actitud de Quesada de renunciar y denunciar a los funcionarios comprometidos en el escándalo de los terrenos en Chilca y que, según el mismo alcalde de esa localidad, Pablo Nalda, no es el único caso sino que existen muchos más. Sin embargo, Bendezú advirtió que “el Apra no hará espíritu de cuerpo con la corrupción” y que, por el bien del partido, espera que los ex titulares de Cofopri y de la Presidencia del Consejo de Ministros ofrezcan una explicación convincente. “Si no se apartan de la dirigencia es porque fueron elegidos legalmente y porque creen en su inocencia”, señaló a este diario.
Acusan a Quesada
El alcalde de Chilca, Pablo Nalda, complicó más la situación del ex titular de Cofopri, Omar Quesada, pues denunció que tras la venta subvaluada de un terreno de 300 mil metros cuadrados (30 Ha) en Chilca existe una mafia que trafica con tierras y que detrás de ello está Cofopri. “Está metido (Cofopri y los funcionarios de esta institución) hasta los huesos en esto, pero no solamente en eso. El pueblo de Chilca ya no tiene un centímetro de playa. Todo ha sido vendido. Cuarenta mil hectáreas han sido negociadas, como la ubicada entre las playas Puerto Viejo y León Dormido, por S/.4,908 soles al traficante Oswaldo Chauca cuando el costo es de 14 millones de dólares”, dijo. Agregó que hace un mes la Superintendencia de Bienes Nacionales recuperó un terreno 15 hectáreas de tierras apropiadas ilegalmente a este mismo personaje de filiación aprista.
Lina Godoy
Redacción La Primera
1 comentario:
y en que quedo las compra de 50 hectareas de terreno en asia por cesar zumaeta donde pago una irrisoria suma de dinero que fue de esa compra nadie dice nada......
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